El exfiscal Alfonso Gómez Méndez y el experto en seguridad Jairo Libreros dialogaron en RCN Radio sobre la crisis del sistema penitenciario en el país y coincidieron en que el problema radica en falta de voluntad política por parte del Gobierno y del Congreso de la República para solucionar la grave situación de hacinamiento.
Los expertos señalaron que un claro ejemplo es el caso del testigo en el proceso contra el expresidente Álvaro Uribe por presunta manipulación de testigos, Juan Guillermo Monsalve, quien hace unos días fue sorprendido en su celda con cosas no permitidas y aseguraron que eso evidencia una falta de voluntad política, indiferencia de la sociedad frente a su situación carcelaria e incompetencia por parte de la guardia del Inpec.
“El Inpec y el Ministerio de Justicia presentó este caso como una situación crítica para desprestigiar un testigo, pero manipula por completo la situación porque la crisis real es de la guardia y del Inpec que no está en capacidad de evitar que ese tipo de cosas ocurran», dijo Libreros.
Agregó que «el testigo tiene una condena y otros procesos que no avanzan. Se impide que los medios tengan acceso a él para que la opinión pública conozca lo que sabe. La voluntad política del ejecutivo es no dejarlo hablar y a la sociedad solo le preocupa que ‘estaba enrumbado’ el testigo”.
Por su parte, el exfiscal Gómez dijo que “las cárceles no dan votos”, al asegurar que los políticos nunca han tomado en serio el problema penitenciario y siempre se proponen soluciones a medias pero no de fondo frente a esta situación.
“Se trata con temas coyunturales (…) Estamos modificando los códigos penales todo el tiempo, el sistema acusatorio se hizo de manera muy superficial (…) No hay una política criminal y penitenciaria sería”, señaló.
Gómez Méndez también dijo que el Ministerio de Justicia encargado de supervisar el funcionamiento de los centros penitenciarios y carcelarios del país, es inestable y que es urgente la construcción de nuevas cárceles.
“Se dejó de construir cárceles (…) Los múltiples sindicatos que muestran debilidad de todo el sistema (…) A los políticos no les interesa porque como construir cárceles no da votos”, precisó.
Entre tanto, el experto Jairo Libreros dijo que el problema radica en voluntad política del Estado. “Los gobiernos que tienen la responsabilidad, no les importa y no tienen interés en sacar adelante un asunto que es esencial”, afirmó.
Señaló que aunque siempre se habla de implementar una política criminal acorde con los estándares internacionales, “nunca se logra, ni se ejecuta” y agregó que tampoco funciona el supuesto modelo de resocialización, que es un asunto de política de justicia.
Enfatizó que el tema de castigo que está presente en Colombia se mantiene y la tasa de reincidencia en es significativa. “En América Latina es del 30%, en Estados Unidos del 6%, en Europa del 9% y en Colombia del 37%. Nosotros no somos capaces de garantizar la resocialización y hay que hacer un cambio”, dijo.
Libreros aseguró que el problema también radica en que a la sociedad no le importan sus presos, “al sector civil le importa cinco la vida, el destino y las nuevas oportunidades que tenga la población carcelaria. Hay indiferencia sobre esta población”.
A pesar del panorama que ambos expertos plantean frente a la situación carcelaria y del Inpec, coincidieron que una posible solución podría ser dejar el sistema en manos de privados, construir más cárceles, dejar de pensar en cárcel para todos los delincuentes y plantear otro tipo de castigos.
“Es necesario cerrar el Inpec porque es insostenible y hay que buscar un modelo mixto que garantice derechos humanos y ofrezca alternativas de resocialización para quienes deseen”, dijo Libreros.