Fue socializado en el Congreso de la República el proyecto de ley que busca reconocer, impulsar y proteger el viche y sus derivados, como bebidas alcohólicas ancestrales, tradicionales y de patrimonio colectivo de las comunidades afrodescendientes del Pacífico.
Este proyecto no solo busca que ‘el viche’ sea reconocido como una bebida ancestral sino que se pueda comercializar en todo el país como una alternativa económica para las comunidades del Pacífico.
El representante a la Cámara, Juan Fernando Reyes Kuri, autor de este proyecto de ley, señaló que lograr que el viche, el arrechón, tomaseca y otras bebidas alcohólicas ancestrales sean reconocidas como licor nacional, podrían generar empleos y dividendos que favorecen a las personas que lo fabrican.
«El viche debe entrar al mercado de los licores por la puerta grande y así esperamos que sea a través de este proyecto de ley y esperamos que puedan avanzar y que los congresistas nos acompañen en esta iniciativa», argumentó el congresista.
«Muchos de estos territorios que fabrican estos licores han sido afectados por el conflicto y por eso se hace aún más importante el reconocimiento y la necesaria aprobación de este proyecto de ley creemos que se debe proteger esta cultura y que se pueda seguir produciendo y destilando de manera artesanal. Es importante que se conserve dicha práctica y que las puedan seguir haciendo en el Pacífico colombiano y que no vengan externos a comenzar entonces ahora a que se realice esa producción», indicó el representante a la Cámara.
El congresista afirmó que de acuerdo a un estudio que fue presentado en el 2007, esas bebidas artesanales pueden significar una comercialización de 70 millones de dólares en dividendos para el país.
«Hemos visto el desarrollo del Petronio Álvarez que es un festival, uno de los más importantes de Latinoamérica que ha movido la economía por más de 50.000 millones de pesos y ha generado empleo», apuntó.
Fuente: Sistema Integrado de Información