En el municipio de Hato Corozal, se busca garantizar el acceso al agua a un total de 50 familias de la vereda Aricaporo.
La tarea consiste en la canalización de por lo menos 300 metros del río Aricaporo y la construcción de un dique tipo «jarillón», para proteger el nacedero donde se capta el vital líquido. “El río cada vez está más cerca del manantial. Si rompe y se lo lleva, quedaríamos totalmente sin el servicio de agua. Este es nuestra única fuente”, manifestó Marcela Martínez presidenta de la JAC.
La actividad, se ha venido realizando con maquinaria de Gestión del Riesgo de Desastres y la Administración Municipal, en articulación con la comunidad y el apoyo del diputado Alejandro López.
Por su parte, Guillermo Velandia, jefe de la Gestión del Riesgo de Desastres en Casanare, explicó que los jarillones y los canales, son una técnica de ingeniería tradicional que se utiliza para controlar el flujo de agua y evitar la erosión en los cauces de los ríos. En este caso, su construcción ayudará a: Proteger el nacedero y garantizar el suministro de agua potable a las familias campesinas. Reducir el riesgo de desastres naturales, como inundaciones y arrastre de sedimentos. Y conservar los suelos y la vegetación en la zona.