Un cuerpo decapitado, que podría ser el de un menor de 13 años desaparecido desde hace días, fue encontrado en Tarascon (sureste de Francia) en la noche del domingo, con marcas que podrían indicar actos caníbales.
El presunto culpable de este homicidio fue abatido por la policía al darse a la fuga.
El cuerpo decapitado y la cabeza de la víctima fueron descubiertos hacia las 21H30 (hora local) del domingo en un departamento de Tarascon, según indicó a la AFP el fiscal de esta ciudad de 15.000 habitantes al norte de Marsella.
«Los investigadores relacionaron este departamento con la desaparición de un menor de su hogar en Marsella hace unos días», apuntó Laurent Gumbau, el fiscal.
El cuerpo tenía jirones de piel de la espalda arrancados, pero es «imposible confirmar la hipótesis de la antropofagia en el estado actual de la investigación», añadió Gumbau.
El inquilino del departamento, un hombre de 32 años «conocido por sus problemas psiquiátricos» y condenado previamente por actos violentos, huyó por el techo del edificio, según el testimonio de los vecinos, y fue abatido por un disparo de la policía tres horas más tarde.
A la espera de la autopsia de los dos cuerpos, no se pudo establecer un nexo de afinidad entre la víctima encontrada en el departamento de Tarascon y el inquilino, insistió el fiscal Gumbau.