Una de las consecuencias de que Estados Unidos oficializara la eliminación de la extinta guerrilla de las Farc de su lista de organizaciones terroristas, con miras a «apoyar mejor» la implementación del Acuerdo de paz sellado hace cinco años, era su retiro también de la llamada Lista Clinton.
Este 1 de diciembre, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Tesoro de Estados Unidos actualizó su lista de organizaciones e individuos que empezarán y dejarán de ser objeto de bloqueo de cuentas y bienes, como sanción económica propia de ser considerado terrorista.
De la llamada Lista Clinton salieron tanto las Farc, como antigua organización, como todos sus líderes, incluso los muertos como Pedro Antonio Marín, alias Manuel Marulanda; Víctor Julio Suárez, alias el Mono Jojoy, o Luis Edgar Devia, alias Raúl Reyes.
Pero de la extensa lista, sale también -posiblemente por un error- Géner García, alias John 40, guerrillero no desmovilizado y considerado uno de los líderes de la disidencia de la ‘Segunda Marquetalia’, cuyo jefe máximo es Iván Márquez y que, en esta misma actualización, entra como grupo a ser sancionado por el Tesoro junto con la disidencia FARC-EP, de Gentil Duarte.
Las personas que realizan transacciones con quienes están en la selección de la OFAC están sujetas a la designación de terroristas, y las instituciones financieras extranjeras que lo hagan podrían ser sancionadas.
«Es un delito proporcionar a sabiendas apoyo material o recursos a Segunda Marquetalia y las FARC-EP, o intentar o conspirar para hacerlo», dijo el secretario de Estado Antony Blinken el lunes pasado.
Estados Unidos designó oficialmente a las FARC como organización terrorista extranjera en 1997, a mediados del enfrentamiento de seis décadas con el Estado colombiano.
Tras la firma del Acuerdo de Paz en 2016, el gobierno del presidente Joe Biden había manifestado su intención de eliminar a las FARC de su listado, en vísperas del quinto aniversario del pacto que llevó a su desarme y disolución tras décadas de combates.