La sorpresiva salida del general Nicacio Martínez de la comandancia del Ejército Nacional ha servido para que se conozcan más detalles de su polémico paso por la jefatura de esa institución y las múltiples acusaciones que se le hacen por temas relacionados con falsos positivos y hasta interceptaciones ilegales.
En las últimas horas, la Revista Semana reveló que el general Martínez habría participado en interceptaciones ilegales a magistrados, otros generales y hasta periodistas.
Uno de los detalles de la publicación destaca que “el primer indicio de que algo andaba mal llegó a oídos de los organismos de inteligencia estadounidenses. Estos habían donado un par de sofisticados equipos técnicos, pero empezaron a recibir información según la cual algunos militares los estaban usando para fines ilegales”.
De la misma forma se conoció que algunos apoyos económicos llegaron “para pagar fuentes que pudieran entregar valiosa información terminaban en los bolsillos de algunos oficiales. Empezamos a notar que nos estaban pidiendo más dinero del habitual con el pretexto de conseguir fuentes de mucho interés».
El integrante de inteligencia, quien al parecer ha venido entregado detalles de estos hechos, también precisó que «nos dimos cuenta que estaban bajando la información de internet”.
De acuerdo con Semana, uno de los militares que trabaja en un batallón de ciberinteligencia les confirmó que “acá se empezó a hacer lo que se hacía en otras unidades de inteligencia como la Rimec. Se creaban informes falsos, basados en fuentes que no existían para conseguir unos recursos que se repartían entre los mandos”.
Lo que habría revelado este suboficial es que le asignaron un número celular y le entregaron datos como el correo electrónico supuestamente de otra integrante de esa institución que estaba afectando los intereses del Ejército, aunque se buscaba a la magistrada de la Corte Suprema de Justicia, Cristina Lombana, quien tuvo hasta mediados del año pasado el caso de manipulación de testigos contra el expresidente Álvaro Uribe.
También se denunció que otro militar activo tuvo a cargo interceptaciones a políticos como Roy Barreras.
También se menciona que a través del sistema ‘El hombre invisible’, se dio orden el año pasado el comando de apoyo de Inteligencia Militar (Caimi) comprar una plataforma tecnológica que fue entregada a un militar retirado y a un activo, por 3.000 millones de pesos.
En la publicación, Semana destacó que “algunos periodistas de SEMANA y hasta las instalaciones físicas fueron objeto de constante vigilancia y seguimiento de integrantes de la inteligencia y la contrainteligencia del Ejército”.
“El primer semestre de ese año hubo sufragios, amenazas directas, entre otras intimidaciones, como respuesta a las denuncias que terminaron con la destitución, procesamiento penal y disciplinario, y encarcelamiento de varios altos oficiales, entre ellos generales”, señaló la revista.
Hasta el momento no se conoce una respuesta oficial por parte del Ministerio de Defensa o el Ejército Nacional sobre este tema, aunque fuentes de alto nivel indican que se trabaja desde la parte jurídica para responder a las acusaciones.
RCN Radio conoció que las declaraciones del Gobierno sobre las verdaderas razones de la salida del oficial de la comandancia del Ejército Nacional, estarían a cargo del ministro de Defensa Carlos Holmes y varios miembros de la cúpula de las Fuerzas Militares y se darían al término de una visita a la población de Bojayá (Chocó) este sábado.