Tras la designación como gestor de paz de Alexander Farfán Suárez, alias ‘Gafas’, reconocido como el carcelero de Ingrid Betancourt, cuando fue secuestrada por las Farc y quien se encuentra recluido en la cárcel La Picota de Bogotá tras ser expulsado de la JEP, por traicionar el Acuerdo de Paz suscrito en 2016, las opiniones en contra no se hicieron esperar.
Farfán fue capturado durante la operación Jaque en el 2008 y aunque fue puesto en libertad el 2017 tras la firma del Acuerdo de Paz, las autoridades lo recapturaron portando armas e insignias de las denominadas disidencias.
Ante esta decisión del Gobierno Colombia, desde Estados Unidos llegaron críticas, se conoció que, para funcionarios y exfuncionarios del Congreso del país norteamericano, quedó la sensación de que el nombramiento es otra “salida en falso” del gobierno Petro, en el marco de la llamada paz total.
Sin embargo, el ministro de Justicia, Néstor Osuna, aseguró que: “Los gestores de paz históricamente son personas que han sido miembros de grupos armados, porque precisamente tienen un perfil con crímenes detrás y se consideran que pueden ser útiles para un proceso de diálogo, de negociación en un proceso de paz”.
Cabe mencionar que la resolución que firmó el presidente Petro también está acompañada de varios documentos remitidos de la Oficina del comisionado de Paz, Danilo Rueda, a la oficina del secretario Jurídico de presidencia, Vladimir Fernández, los cuales argumentan que Farfán tiene el camino para surtir esa tarea.
El ministro de Justicia ha sido claro en señalar que a pesar de la designación, ningún gestor dejará de lado sus procesos jurídicos e insistió en que deben responder a cada diligencia que asigne la justicia colombiana.
Fuente: Sistema Integrado de Información – RCN Radio – Carol Yesenia Rodríguez Gutiérrez