Todos los pilotos, Centauros del Aire, mujeres y hombres que dan su vida por el llano y por Colombia, portarán como muestra de humildad, de regionalismo y un gran arraigo cultural, esta pieza indispensable en el vestir del llanero que, junto al caballo, lo identifica plenamente; en este caso será el piloto con el sombrero a su aeronave.
El significado de esta prenda típica y tradicional de los llanos orientales, trasciende más allá de un simple cubre cabezas, así bien lo define el maestro y cantante casanareño (oriundo de Sogamoso, Boyacá, pero criado en Casanare) Orlando ‘El Cholo’ Valderrama en una de sus canciones: “cuánto aguacero he aguantado bajo tus alas, tormentas y resolanas” y es que llanero que se respete, tiene por lo menos dos sombreros, uno es el de trabajo, ancho de ala, cuarteado por el sol en días de vaquería y ajado por las lluvias que el sombrero ha ayudado a atajar y el otro es el sombrero para salir a fiestas, más conocido como ‘peloeguama’.La historia relata que los sombreros llegaban en barcos que remontaban los ríos Orinoco y Meta hasta el municipio de Orocué en Casanare, donde desembarcaban provenientes de las montañas del centro de Europa. Actualmente, los artesanos locales utilizan otros materiales como el cuero vacuno para su elaboración.
El hecho de usar esta emblemática pieza ha generado una aceptación muy favorable en los llaneros, especialmente en los yopaleños, quienes comentan en redes sociales: “¡Qué buena iniciativa para exaltar la identidad y sentido de pertenencia por nuestra tierra! ¡Bien por la Fuerza Aérea!”; “¡Qué bien por la Fuerza Aérea! Felicitaciones, nos sentimos orgullosos por tenerla en nuestro Casanare”.
Y precisamente ese sentimiento de orgullo es el que tienen los Centauros al portarlo y volar sobre esta tierra casanareña para protegerla, así lo relató el Coronel Édgar Alexander Salamanca, comandante del Grupo Aéreo del Casanare: “honramos y valoramos este símbolo del Casanare, de los campesinos que diariamente se lo ponen para trabajar, para cuidarse del sol o la lluvia y que les sirve de protección. Queremos ser partícipes y apropiarnos de este arraigo y esta cultura del sombrero, para usarlo con nuestro uniforme de guerra, que es el overol de vuelo”.Esta idea del General Rueda será implementada solo en esta base del país para los pilotos y tripulantes, todos los días jueves con el overol de vuelo, demostrándole al Casanare que está en los corazones de los militares de su Fuerza Aérea y que ellos dan su vida por el llano y por Colombia.