Luego de más de un mes, Dimayor estaría esperando la autorización del gobierno nacional para poner en marcha el protocolo sanitario que propuso para iniciar los entrenamientos en los equipos del FPC y posteriormente reanudar la Liga Betplay en el mes de agosto.
El estricto protocolo tiene varios detalles para el análisis como la cantidad de pruebas de covid-19 que se realizarán en la competencia y en los entrenamientos; también la restricción para la aglomeración innecesaria de personas y una lista que enviarán los clubes a Dimayor sobre sus futbolistas y trabajadores que se harán presentes en los escenarios deportivos.
Entre todo esto, figura un supuesto borrador del consentimiento que deberán firmar todos los jugadores y demás personas que vayan a hacer parte de la actividad competitiva. Allí se estipula que deberían firmar con nombre y cédula un texto donde eximen a Dimayor de la responsabilidad en caso que alguno de ellos se contagie de covid-19.
En el documento estaráa explicado que los jugadores entenderán que los clubes y Dimayor les realiaría las respectivas pruebas de covid-19 de manera individual en la primera fase del protocolo y que tienen las condiciones sanitarias para llevar a cabo su profesión, por lo que recalcan la responsabilidad de cada uno para evitar contagios en cualquier otra circunstancia de la vida cotidiana.
Las fechas presupuestadas para el regreso del fútbol están tasadas para que después del 22 de junio inicien los entrenamientos individuales, ya en mediados de julio los entrenos colectivos y la actividad de fútbol profesional el 16 de agosto si ya se han descartado los posibles casos de coronavirus entre la gente del fútbol.