Se disputó el último compromiso de la fecha dos de la fase de grupos del Mundial de Qatar 2022, y corrió por parte de Uruguay y Portugal, dos selecciones que tenían la necesidad de ganar para asegurar un cupo a los octavos de final.
Este encuentro terminó con un final de 2-0 a favor de la selección europea, que encontró los dos tantos a través de Bruno Fernandes a los minutos 54 y 90+3.
Más allá del resultado y de lo que significaba para cada selección ese marcador, el partido se hizo llamativo después de que un aficionado se metiera a la cancha y recorriera parte de ella agitando una bandera LGBTIQ+.
Aparte, también tenía una camiseta en la que pedía ayuda para las mujeres de Irán y donde también acudía a que era necesario salvar a Ucrania.
Este hecho no se hizo conocedor de forma profunda por parte de los medios televisivos tras ver las normatividades del país organizador, pero rápidamente otros aficionados lograron identificar al hombre que tildaron de ‘héroe’.
Se trata del italiano Mario Ferri, quien hace un acto como estos por tercera vez, después de que en Brasil 2014 saltara al césped en Bélgica-Estados Unidos; y en 2011 en Champions League, tras la final entre Barcelona y Manchester United.
Aunque todavía no se sabe lo que acarreará para este personaje el hecho cometido, por ahora es evidente que quiso llamar la atención sobre todos los temas que estaban siendo evitados por Qatar.