El canciller italiano, Luigi Di Maio y el alcalde de Nápoles, Luigi de Magistris, reclamaron este jueves que se esclarezca la muerte del cooperante Mario Paciolla, hallado sin vida en San Vicente del Caguán, una de las regiones más violentas de Colombia.
Paciolla, de 33 años, oriundo de Nápoles, era miembro de la Misión de Verificación de los acuerdos de paz de las Naciones Unidas en Colombia y su cuerpo fue hallado el 15 de julio en su residencia de esta localidad, conocida por haber sido retaguardia guerrillera en el conflicto que duró más de 50 años.
«No escatimaremos esfuerzos para arrojar luz sobre esta trágica historia, existe el mayor compromiso de mi parte y de la cancillería» para descubrir la verdad sobre la muerte de un «joven brillante y comprometido en una misión muy delicada», aseguró Di Maio.
El canciller fue convocado por el Senado italiano para una sesión dedicada al caso de Paciolla. «Las investigaciones de la policía local están en marcha y las autoridades colombianas han asegurado que el caso también es de absoluta prioridad para ellos», explicó.
Di Maio precisó que «un fiscal, un magistrado especializado, un equipo forense especial e investigadores expertos trabajan para llegar a la verdad lo antes posible», dijo.
«Esperamos el resultado» de la autopsia tras lo cual el cuerpo será repatriado, probablemente «mañana», agregó el ministro.
Por su parte, el alcalde de Nápoles, ofreció todo su «apoyo para obtener verdad y justicia, un compromiso que hemos tomado para honrar su memoria y su vida, dedicada a la construcción de un mundo más justo e inclusivo», escribió De Magistris en un texto.
Paciolla, poeta y periodista, murió en extrañas circunstancias que deben ser aún aclaradas, por lo que las autoridades de su ciudad de nacimiento, así como organizaciones no gubernamentales y compañeros de trabajo, reclaman una investigación exhaustiva de lo ocurrido.
«¿Suicidio?»
Según las autoridades colombianas locales, el hombre se habría suicidado, una versión que su familia en Nápoles, y en particular su madre, Anna Motta, con la que hablaba con frecuencia, rechaza tajantemente, según precisó el alcalde.
Motta contó a De Magistris que su hijo estaba «preocupado por algo que había visto, oído o intuido», por lo que tenía previsto adelantar su viaje a Italia, fijado paradójicamente para el día de su muerte.
La portavoz de la Comisión Europea, Nabila Massrali, a la que la prensa en Bruselas solicitó por este caso, aseguró que la Unión Europea (UE) «sigue con particular atención» la situación.
«Hemos visto los informes sobre la trágica muerte de Mario Paciolla (…) Es importante que se establezcan los hechos y que las autoridades colombianas lleven a cabo las investigaciones necesarias. La UE sigue de cerca la situación con las Naciones Unidas en Colombia«, precisó.
La embajada de Colombia en Italia no quiso pronunciarse por ahora. «Es el ministerio de Relaciones Exteriores quien está a cargo de las declaraciones. Mientras tanto la autoridad judicial colombiana está llevando adelante el caso y realizando las investigaciones con extremo cuidado«, explicó un portavoz.