El conflicto entre Israel y Hezbolá se intensificó durante el pasado Yom Kippur, uno de los días más sagrados para el pueblo judío, cuando Hezbolá lanzó decenas de cohetes y drones hacia el norte de Israel, provocando alertas en ciudades como Haifa, Safed y Herzliya. Durante el fin de semana, los ataques alcanzaron una casa en Herzliya el viernes, causando daños materiales, pero sin reportes de víctimas. Los ataques continuaron el sábado sin mayores consecuencias, mientras que las sirenas de advertencia sonaban en varias ciudades del norte israelí.
En respuesta, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) intensificaron sus operaciones en el sur del Líbano. El ejército israelí ordenó la evacuación de otras 22 aldeas en la región, advirtiendo a los habitantes que no regresaran mientras las tropas continúan combatiendo a Hezbolá. «Por su propia protección, no regresen a sus hogares hasta nuevo aviso», afirmó el portavoz militar árabe Avichay Adraee en un mensaje publicado en X (anteriormente Twitter). Asimismo, se instó a los trabajadores de salud del sur del Líbano a no colaborar con Hezbolá y evitar el uso de ambulancias, ya que las FDI afirman que estos vehículos están siendo utilizados por combatientes del grupo terrorista.
El viernes por la tarde, dos drones fueron lanzados desde el Líbano hacia Israel, uno de los cuales fue derribado por aviones de combate israelíes. El segundo dron logró impactar en Herzliya, y aunque el ejército afirmó estar investigando el incidente, no se ofrecieron detalles sobre por qué no fue interceptado en pleno vuelo. Imágenes compartidas en redes sociales mostraban al UAV volando bajo sobre los edificios de la ciudad antes del impacto.
Las operaciones de Israel en el sur del Líbano no solo se han dirigido contra Hezbolá, sino que también han generado críticas internacionales. Durante el fin de semana, Israel fue objeto de señalamientos por un ataque que golpeó una posición de mantenimiento de paz de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (FPNUL). Las FDI admitieron que sus tropas dispararon hacia una «amenaza inmediata» cerca de una posición de la ONU, lo que provocó heridas a dos personas. Sin embargo, aseguraron que la investigación inicial indicó que el puesto de la FPNUL, ubicado a unos 50 metros de la amenaza, fue alcanzado accidentalmente.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, exigió que Israel dejara de atacar las posiciones de la ONU «de manera absoluta y contundente». Por su parte, el enviado especial de Estados Unidos al Líbano, Amos Hochstein, calificó el incidente como «inaceptable» y reiteró que su gobierno estaba trabajando «sin parar» para lograr un alto el fuego en la región. Francia, Italia y España también condenaron el ataque y pidieron que este tipo de incidentes «terminen de inmediato», insistiendo en que todas las fuerzas de paz deben ser protegidas.
A pesar de la presión internacional, Israel sigue con su campaña contra Hezbolá, y durante las últimas semanas ha lanzado bombardeos en Beirut que, según observadores, han eliminado a la mayoría de los líderes del grupo terrorista. Las explosiones secundarias que siguieron a muchos ataques han sido interpretadas como evidencia de que los objetivos estaban cargados de armamento, lo cual Hezbolá ha negado rotundamente. Su portavoz, Mohammad Afif, declaró que dichas explosiones fueron causadas por «bombas de tiempo israelíes» diseñadas para crear la apariencia de que había armas almacenadas en los suburbios de Beirut.
La guerra continúa teniendo un impacto devastador en ambos lados. El viernes, un trabajador extranjero tailandés de 27 años murió, y otro resultó herido cuando una munición sin detonar explotó en un huerto en Kibbutz Yir’on, en la Alta Galilea. Las autoridades de seguridad israelíes están investigando el caso, aunque se cree que la munición fue disparada previamente por Hezbolá.
Mientras tanto, las FDI enviaron más tropas al sur del Líbano el viernes, en medio de las operaciones terrestres que han destruido túneles, posiciones defensivas y otra infraestructura de Hezbolá. Desde el 8 de octubre, las fuerzas lideradas por Hezbolá han atacado casi a diario comunidades israelíes y puestos militares a lo largo de la frontera, afirmando que lo hacen «para apoyar a Gaza» en medio de la guerra que allí se libra.
Israel, que ha advertido durante meses sobre la posibilidad de tomar acciones si no se encontraba una solución diplomática, ha intensificado significativamente sus ataques en las últimas semanas, con el objetivo de eliminar la amenaza de Hezbolá en la región fronteriza.
Fuente: Sistema Integrado de Información – RCN Radio – Juan Camilo Cely