La periodista Clarissa Ward, quien recientemente fue acosada por los Talibán por informar lo que está ocurriendo en Afganistán, informó este viernes, a través de su cuenta de Twitter, que ya abandonó el país de Oriente Medio.
Desde el pasado lunes, cuando los Talibán se hicieron del control de Kabul, la capital de Afganistán, la imagen de la periodista Clarissa Ward se hizo viral por cuenta de un montaje del antes y después de ese día en el que se le veía primero sin velo y vestida con ropa de colores y luego con el velo negro.
En ese momento, la corresponsal de CNN aclaró que el cambio en su atuendo correspondía a su idea de pasar desapercibida, mientras registraba lo que estaba ocurriendo en el terreno y daba –dijo– protagonismo a lo importante: la historia.
Sin embargo, aun cuando el mundo occidental aplaudía su ética laboral y, por ende, sus informes, la periodista no consiguió escapar de la mira Talibán que, este jueves (hora Colombia), la alcanzó y la confrontó.
Mientras la reportera entrevistaba a los afganos sobre las dificultades a las que se enfrentan para llegar al aeropuerto y así conseguir abandonar el país, la periodista fue amenazada por varios combatientes que, con armas en mano, demostraron su molestia por lo que ella y su equipo estaban haciendo.
«Informes sobre los obstáculos a los que se han enfrentado estadounidenses y afganos al intentar llegar al aeropuerto de Kabul mientras los combatientes talibanes intentan bloquear el acceso con disparos y violencia», publicó CNN acompañando el reporte en el que se ve cómo Ward sorteó la situación.
En el video, se ve cómo la periodista camina por las calles de Kabul, mientras, al parecer es perseguida por un grupo de hombres. «Están un poco molestos con nosotros», dice la periodista mientras intenta, junto a su equipo llegar a su vehículo.
Finalmente, queda grabado cómo es alcanzada por varios talibanes armados le dejan claro que su labor, no es del todo aceptada. Vale la pena recordar que una vez tomaron el control de la ciudad, los lideres Talibán, entre otras, aseguraron que los periodistas extranjeros no tendrían inconvenientes para ejercer su trabajo.
El incidente al parecer hizo mella y este viernes, la periodista publicó una foto en la que se ven decenas de personas a bordo de un avión en el que también viaja la reportera.
«En nuestro vuelo y preparándonos para el despegue», indicó.