La reporte de la ONG de DD.HH. devela incremento de asesinatos, reclutamiento de menores y violencia sexual, entre otras afectaciones.
José Miguel Vivanco, director para América Latina de la organización Human Rights Watch (HRW), reveló los resultados del informe sobre violencia desbordada en la región de Catatumbo (Norte de Santander) y aseguró que los grupos ELN, EPL, así como las disidencias de las Farc, actúan permanentemente contra los 300 mil habitantes de esta zona del país.
De acuerdo con Vivanco, en el Catatumbo «hay violaciones de mujeres y niñas, desplazamiento forzado, reclutamiento de menores y los homicidios son tres veces superiores al promedio nacional … es el paraíso de la ilegalidad».
El diplomático agregó que «no hay CTI en Tibú ni en Sardinata, solo en Ocaña y la situación es tal, que los levantamientos de cadáveres los hacen los funcionarios de las funerarias«.
Vivanco alertó por las condiciones de seguridad en los municipios de la región, al mencionar que no hay patrullaje ni servicio a la comunidad, ya que «los militares hacen presencia en zonas estratégicas cuidando instalaciones y recursos, aunque la gente los reclama en acción más cercana a la población. Pero esto no se resuelve solo con fuerza pública«.
Reiteró la necesidad que haya presencia judicial en Norte de Santander, al referirse al control de los grupos ilegales sobre la población, ya que «para poder transitar de un sitio a otro, hay que tener un permiso local … los obligan a hacer cursos a veces en Venezuela y si no asisten a los cursos, los asesinan».
Explicó que el punto de partida de este informe fue la firma del Acuerdo de Paz, que permitió una disminución de los homicidios, aunque después empezó la disputa por ese territorio entre los distintos grupos ilegales, que provocaron el incremento de asesinatos, reclutamiento de menores, violencia sexual y desaparición forzada.