Casi un año después de las pruebas intensivas y tras recorrer 10.000 kilómetros en diversas condiciones geográficas y altitudes, ‘Flexie’, el primer vehículo en Colombia que combina bioetanol 100 % colombiano con energía eléctrica, ha demostrado un excelente desempeño.
Este hito representa un paso significativo en la transición del país hacia la movilidad sostenible.
El ‘Corolla Cross híbrido Flex Fuel’, alimentado exclusivamente con bioetanol de caña de azúcar colombiana, ha superado con éxito una variedad de pruebas, incluyendo recorridos por el Alto de La Línea, la Ruta del Sol y terrenos diversos en los Llanos Orientales y la Costa Caribe.
Este automóvil, desarrollado en colaboración entre Toyota y Asocaña, marca un avance importante en la reducción de la huella de carbono y la promoción de un transporte más limpio en el país.
Alexandra Pfeil-Schneider, vicepresidenta de Sostenibilidad & Mercadeo en Automotores Toyota Colombia, señaló que ‘Flexie’ ha superado satisfactoriamente las pruebas y agregó que ahora se están analizando los datos recopilados para comprender mejor el comportamiento del vehículo en diferentes condiciones.
Por su parte, Claudia Calero, presidenta de Asocaña, indicó que «las condiciones para una mayor producción de bioetanol nacional, así como sus canales de distribución al público en general, permitirán que marcas como Toyota traigan estos vehículos a Colombia de forma masiva. Un ejemplo es el caso de Brasil, ya que su apuesta para el cumplimiento de las metas en reducción de emisiones de gases efecto invernadero, es el uso de este biocombustible renovable obtenido a partir de la biomasa, el cual es muchísimo más amigable con el medio ambiente».
Durante su recorrido, ‘Flexie’ fue sometido a pruebas exhaustivas por parte de la Universidad Tecnológica de Pereira, utilizando mezclas de 20% y 100% de etanol.
Los resultados mostraron que las emisiones de hidrocarburos no quemados son prácticamente nulas, mientras que el vehículo mostró mejoras en la aceleración y potencia.
Además de sus beneficios ambientales, el uso de bioetanol colombiano tiene un impacto positivo en la economía del país. La agroindustria de la caña de azúcar emplea a más de 286 mil personas y genera encadenamientos productivos que benefician a la economía local.
Claudia Calero, presidenta de Asocaña, destacó la importancia de aumentar la producción y distribución de bioetanol en Colombia para que vehículos como ‘Flexie’ puedan ser introducidos en el mercado de manera más amplia.
Desde que comenzó el programa de oxigenación de la gasolina en 2005, se han utilizado 1.670 millones de galones de bioetanol en Colombia, reemplazando el uso de 1.059 millones de galones de gasolina en los vehículos.
Fuente: Sistema Integrado de Información – RCN Radio – Geraldine Rozo Amórtegui