El Mundial de Qatar 2022 es uno de los eventos deportivos con más polémicas, que más allá de lo deportivo, han manchado la verdadera esencia que tienen los aficionados cada cuatro años para reunir las 32 selecciones que buscan ponerse la corona.
Por más que Qatar, como sede de esta cita orbital, sea criticada, lo que sí han resaltado es la exclusividad en el uso de la tecnología para todos los aspectos que involucran el deporte como tal, es decir, que el estadio, los implementos y hasta el mismo VAR cuentan con varias cosas únicas que lo hacen un mundial impactante.
Teniendo en cuenta lo anterior, en los últimos días se han hecho virales varias imágenes en las que se puede ver cómo los balones están conectados a la corriente, como si fueran un dispositivo electrónico móvil, antes de iniciar cada compromiso, hecho que llamó mucho la atención.
Aunque este tema no ha sido muy relevante por parte de los organizadores, la FIFA sí salió a dar la explicación con respecto a esta situación, dando a entender que el Al Rihla, nombre que lleva esta pelota,tiene una tecnología muy avanzada.
Según el mayor ente regulador del fútbol mundial, los balones están hechos con un material especial y un chip de dos sensores.
UWB y IMU son los nombres de estos dos elementos, los cuales tienen funciones específicas como dar a conocer la ubicación exacta del balón y otras características específicas que pueden ayudar a definir momentos cruciales dentro de los partidos: velocidad, orientación y fuerzas gravitacionales.
Con esta tecnología muy avanzada, se hace necesario que los balones se carguen antes tras el uso de una batería que ayuda que durante el compromiso los sensores mantengan activados.