Un gran número de católicos nigerianos, encabezados por la Conferencia Episcopal del país, salieron a la calle ayer, 1 de marzo de 2020, para protestar por el alto nivel de inseguridad en el país, en un intento de dirigir la atención del Gobierno federal y de la comunidad internacional hacia la difícil situación de los cristianos y para rezar por la paz en la nación.
En la manifestación, que adoptó la forma de una pacífica procesión de oración, los Obispos, sacerdotes y fieles iban vestidos de negro y llevaban pancartas con inscripciones como “No matarás”, “La vida tiene miedo”, “Gobierno: asume tu responsabilidad”, “Dios odia la injusticia”.
En su alocución a los congregados en la protesta, el presidente de la Conferencia Episcopal Católica de Nigeria, Arzobispo Augustine Akubeze, dijo: “Hoy, nosotros, los Obispos católicos de Nigeria, con un apoyo significativo de sacerdotes, personas consagradas y nuestros queridos fieles laicos, nos embarcamos en una protesta pacífica contra el alto nivel de inseguridad en toda Nigeria. Estamos en esta protesta pacífica en nombre de los más de 22 millones de católicos y más de 100 millones de cristianos de Nigeria. Protestamos contra los brutales asesinatos de nigerianos inocentes por parte de Boko Haram y de los pastores fulani terroristas. Estamos reunidos aquí para manifestar nuestra protesta contra los secuestros a cambio de rescates en toda Nigeria. Estamos reunidos para llorar a los niños, bebés hombres y mujeres que han sido asesinados por terroristas. Estamos reunidos para hacer saber al Gobierno federal nigeriano que estamos cansados de que nos diga que Boko Haram ha sido “técnicamente derrotado”, cuando lo cierto es que sigue atacando con impunidad”.
El Arzobispo lamentó que la respuesta del Gobierno a los ataques terroristas sea insuficiente. “El fracaso a la hora de proteger a personas inocentes de ataques implacables es malvado. La falta de procesamiento judicial de los terroristas es infame”, dijo.
Además, echó en cara al presidente de Nigeria, Mohammadu Buhari, que no cumpliera con su responsabilidad de proteger vidas y bienes y de llevar ante la justicia a los responsables de los asesinatos.
En un apasionado llamamiento a la comunidad internacional dijo: “Nosotros, los Obispos católicos de Nigeria, hacemos un llamamiento a la comunidad internacional para que ayude a Nigeria. Debemos vernos como una familia global, universal. Es preciso que se
informe a Occidente sobre las lágrimas y el dolor de los indefensos cristianos perseguidos en Nigeria. Los periodistas y líderes políticos occidentales deberían prestar a Boko Haram la misma atención que a otros grupos terroristas como Al Qaeda y el ISIS. Si los medios de comunicación occidentales ofrecieran una cobertura completa y firme de las atrocidades que ocurren en Nigeria, descubrirían que a diario mueren personas en Nigeria a manos de Boko Haram de la misma manera que mueren personas en Siria”.
Anteriormente, en su homilía en la Misa de apertura de la sesión plenaria de la Conferencia Episcopal Católica de Nigeria, celebrada pocas horas antes de la protesta, el Arzobispo católico de Abuja, Mons. Ignatius Kaigama, dijo: “No podemos hacer como si todo estuviera bien en Nigeria. Estamos luchando contra terroristas, fanáticos religiosos, criminales, secuestradores, saboteadores económicos, líderes políticos sin escrúpulos y gobernantes partidistas. Parece que todo el mundo está de paso, incluso aquellos que dan forma a nuestras políticas y en cuyas manos hemos depositado nuestra seguridad, la unidad y la estabilidad, el presente y el futuro de nuestros hijos”.
Y rezó: “Que nuestras oraciones borren el mal de nuestra tierra, empapada de sangre de ciudadanos inocentes, y que ablande los corazones de piedra de la gente que se regocija con el sufrimiento de hermanos y hermanas a los que mantienen en cautiverio”.
El P.Sebastain Sanni, sacerdote de la Archidiócesis de Abuja que llevaba la pancarta “No matarás”, explicó a Ayuda a la Iglesia Que Sufre (ACN): “Vamos todos de negro para llorar no sólo a nuestros hermanos y hermanas cristianos asesinados por Boko Haram, sino también para protestar por el colapso de seguridad del país, la escalada del terror de Boko Haram y la débil respuesta del Gobierno. Está lloviendo, pero eso no nos desalienta, rezamos el Rosario bajo la lluvia”.
También habló con ACN un creyente laico, Ugochukwu Okereke, que participó en la protesta junto a su esposa. Estaba muy contento con esta iniciativa de la Conferencia Episcopal Católica de Nigeria, que calificó de “un paso en la dirección correcta”. También lamentó la desafortunada situación del secuestro de cristianos por los que se pide a las familias enormes sumas como rescate, siendo asesinados una vez entregado el dinero. Espera que se ponga fin a todos los males del país.
Fuente y fotografías: ACN Colombia