El expiloto alemán Michael Schumacher registra más de seis años desde aquel desafortunado 29 de diciembre de 2013, cuando sufrió un grave accidente en los alpes franceses mientras practicaba esquí y que le generó una severa lesión cerebral.
Después de haber estado estado en coma inducido hasta mediados de 2014, el siete veces campeón del a Fórmula 1 despertó y fue trasladado a una clínica para iniciar su rehabilitación, aunque tiempo después su familia decidió continuar con su proceso en su residencia en Suiza.
A pesar de que mucha ha sido la información que se ha filtrado con respecto al estado de salud del expiloto, su esposa, Corinna Schumacher, ha reitera constantemente que ese tema es privado y solo se maneja al interior del núcleo familiar.
Sin embargo, este sábado 4 de julio, el medio británico Mirror reveló algunas de las consecuencias que le ha dejado el accidente al alemán en un artículo titulado «los devastadores ‘poblemas de salud secretos’ de Michael Schumacher después de un horrible accidente de esquí».
En la nota se afirma que Schumacher sufre un notorio deterioro físico, lo que lo hace ser muy diferente a la persona que transitaba por las pistas de Fórmula 1, según se informa, padece una atrofia muscular avanzada y una osteoporosis que ha hecho que sus huesos se debiliten, debido también a todo el tiempo que ha pasado acostado en una cama.
“Debemos imaginar a una persona muy diferente de la que recordamos en la pista, con una estructura orgánica, muscular y esquelética muy alterada y deteriorada. Ese es el resultado del trauma cerebral que sufrió”, dijo hace algunos meses el neurocirujano italiano Nicola Acciari.
En las últimas semanas se había conocido que Schumacher sería sometido a un tratamiento con células madres, pero ante la coyuntura por el coronavirus, esto fue desmentido.
Texto realizado por Daniel Zabala/ Artículo tomado de RCN RADIO.