Se estima que más de 20 personas murieron y otro número aún no precisado resultó herido este sábado, después de que el autobús en el que viajaban cayera por un precipicio en la región de Piura, en el norte de Perú, informaron fuentes oficiales y medios locales.
El accidente ocurrió en un tramo de la carretera que une a las localidades de El Alto-Los Órganos con la ciudad de Talara, a más de 1.100 kilómetros al norte de Lima, indicó la agencia oficial Andina.
La emisora RPP precisó que se produjo a la altura del kilómetro 121 de la carretera Panamericana Norte y que el autobús transportaba a 60 pasajeros.
Según la información de algunos medios, los fallecidos pueden llegar a 25, aunque todavía se espera la confirmación oficial de las autoridades, mientras que los heridos han sido trasladados a los centros médicos de los pueblos de El Alto y Máncora, y a una clínica de Talara.
El medio El Regional de Piura agregó que hasta el lugar del accidente llegaron agentes de la Policía Nacional, así como miembros del serenazgo (Policía municipal) y de los bomberos para auxiliar a los heridos, mientras que se esperaba la orden de la Fiscalía para retirar los cuerpos de los fallecidos.
El autobús se dirigía hacia la ciudad de Tumbes, fronteriza con Ecuador, y la Policía señaló que investiga las causas del accidente, que se produjo en una zona con una pendiente muy pronunciada.
La Superintendencia de Transporte Terrestre de Personas, Carga y Mercancías (Sutran) confirmó «el lamentable accidente» y expresó «sus condolencias y solidaridad con las familias afectadas».
Añadió que ha activado «todos los protocolos de intervención coordinando de manera articulada con las autoridades competentes a fin de recabar la información relacionada al accidente».
Las primeras indagaciones, sostuvo, indican que el ómnibus, de la empresa Q’orianka Tours Águila Dorada, contaba con habilitación para el transporte de personas, certificado de inspección técnica y seguro obligatorio de accidentes de tránsito.
Este tipo de accidentes se producen en Perú causados, en muchos casos, por el mal estado de las carreteras y del parque automotor, así como por la geografía agreste y la imprudencia de los choferes.