Colombia es una selección de fútbol histórica y reconocida por todo el mundo. Con una Copa América en su palmarés, cosechada en 2001, siempre consigue sacar jugadores interesantes nacionales. En la actualidad, brillan por el viejo continente, donde se acumulan las ligas de mayor prestigio, nombres como los de Luis Díaz, Jefferson Lerma o Jhon Durán. Pero ya hace muchos años que el talento cafetero da que hablar, y en este artículo repasaremos quiénes son los mejores jugadores de la historia del país.
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Radamel Falcao
Hablar del fútbol colombiano es hablar del potencial ofensivo de las grandes estrellas históricas. Uno de los que más dieron que hablar en los últimos tiempos fue Radamel Falcao, con una extensa carrera en Europa y considerado como uno de los delanteros modernos más resolutivos del mundo. Su gran técnica individual, sumada a su indiscutible olfato goleador, lo llevó a ser intocable en la gran mayoría de equipos por donde pasó, así como en la selección, donde sigue siendo el máximo goleador histórico con 36 tantos.
El Tigre, como popularmente se le conoce, está en los últimos compases de su carrera deportiva defendiendo la camiseta del Rayo Vallecano, equipo de la capital española, donde ya dejó huella con el Atlético de Madrid. Con los colchoneros, donde estuvo dos temporadas solamente, consiguió una Copa del Rey y una UEFA, que también había levantado con el Oporto. También pasó por el AS Mónaco, el Manchester United, el Chelsea y Galatasaray. En el cómputo global, ha alcanzado más de 300 goles en 580 encuentros disputados.
Carlos Valderrama
Uno de los mayores talentos de la Colombia de la década de los años 90 es, indudablemente, Carlos Valderrama. Para aquellos que no vieron cómo jugaba, era un volante con gran trato de balón que llegó a disputar tres Mundiales con la Tricolor: Italia 1990, Estados Unidos 1994 y Francia 1998. Gran ídolo de la hinchada del Junior de Barranquilla, el Pibe era uno de los líderes del combinado nacional, tanto dentro del campo como fuera de él, donde se convirtió en todo un ejemplo para los más jóvenes de la época.
Siempre destacó más por ser mejor repartidor de asistencias que por su aportación goleadora. Con la selección dejó 11 tantos y 32 pases decisivos en 115 encuentros disputados, mientras que a nivel de clubes el registro es de 72 goles y 152 asistencias en 708 partidos. Pasó por varios conjuntos del país como Deportivo Cali, así como por franquicias de los Estados Unidos: Tampa Bay Mutiny, Miami Fusion o Colorado Rapids. También fue de los primeros en dejar huella en el fútbol europeo, pese a su corto paso, defendiendo al Montpellier y al Real Valladolid.
James Rodríguez
Como jugador histórico, tanto por trayectoria como por palmarés, se debe mencionar a James Rodríguez, seguramente la figura con más calidad del siglo XXI del país. Se le consideró como uno de los mediapuntas más deseados del mundo justo al aterrizar en Portugal, donde brilló con el Oporto. Pasó también por el AS Mónaco, el Real Madrid, el Bayern de Múnich, el Everton, el Olympiacos o el São Paulo. En los últimos años, se le echó en falta cierta regularidad o estabilidad para encontrar un contexto idóneo donde explotar su potencial y consolidarse.
Aun así, su vitrina particular está al alcance de pocos elegidos. El gran reconocimiento a nivel individual llegó con la Bota de Oro en la Copa del Mundo de 2014, donde anotó seis tantos, pero a nivel colectivo poco más se le puede añadir. Tiene ligas nacionales en Argentina, Portugal, España y Alemania. A nivel internacional, se hizo con una UEFA con el conjunto luso en 2011 y con dos Champions League vistiendo de blanco: 2016 y 2017. A sus 32 años, todavía sigue en activo en Brasil recuperando el buen estado físico.
Freddy Rincón
Freddy Rincón formó parte de la generación dorada de los 90 y, para muchos, durante un tiempo, se convirtió en uno de los mejores futbolistas del mundo. Se desenvolvía con gran naturalidad en el centro del campo; pegado al área era su zona, donde podía romper defensas con su velocidad y su potente remate. La llegada, algo que ahora se valora mucho en el mundo del fútbol, era su fuerte y lo demostró con el cuadro cafetero, con quienes jugó tres Mundiales y llegó a anotar 17 tantos en 84 partidos oficiales como internacional.
Como Valderrama, fue uno de los talentos que probó suerte en el viejo continente, donde defendió las camisetas de los históricos Real Madrid y Nápoles. En ambos casos, estuvo una temporada y sin títulos que levantar. Sí que tuvo más trascendencia en la liga nacional, tanto en Independiente Santa Fe como en América de Cali, donde salió campeón. También en Brasil, donde posteriormente ejerció de entrenador, y levantó copas con Palmeiras y Corinthians. Un total de 169 dianas en 675 choques a nivel de clubes; no es un registro menor para un centrocampista.
Faustino Asprilla
Desconocido entre los más jóvenes, Faustino Asprilla, también dejó huella en la década de los 90, seguramente la más gloriosa de la historia del fútbol colombiano. Era un delantero con gran olfato goleador y que consiguió ser decisivo en casi todos los equipos por donde pasó. Se retiró en 2004 con un balance de 450 partidos a nivel de clubes, 146 goles y 108 asistencias. A nivel de selección, también dejó huella, participando en dos Mundiales y consiguiendo en 66 encuentros oficiales un total de 23 dianas y 17 pases decisivos.
Surgido de la cantera de Cúcuta Deportivo y consolidado en Atlético Nacional, su mejor rendimiento lo disfrutaron los aficionados del Parma. Con los italianos consiguió una Copa Italiana, una Recopa de Europa y dos Copas de la UEFA. Después de esa época gloriosa, también probó en la liga inglesa con el Newcastle United, con diferente suerte, para luego regresar a tierras sudamericanas y terminar con breves periodos en Palmeiras, Fluminense, Atlante, Universidad de Chile, Cortuluá y Estudiantes de La Plata.
Willington Ortiz
Nombrado en el año 2000 por la IFFHS como el mejor futbolista colombiano del siglo XX, Willington Ortiz era sinónimo de regate y espectáculo. Durante más de una década fue el referente del combinado nacional, pero no disputó ningún Mundial. A diferencia de los ejemplos antes mencionados, solamente vistió tres elásticas en su carrera y todas fueron de conjuntos colombianos, aunque por calidad podía haber salido a otros países: Millonarios, Deportivo Cali y América. Entre los tres, dejó 203 goles en 705 partidos.
Son dos los grandes objetivos que no pudo conseguir el Viejo Willy. Por un lado, nunca levantó la Copa Libertadores de América pese a llegar en tres ocasiones a la gran final. Por otro, disputó cuatro eliminatorias para clasificarse para la Copa del Mundo de Alemania 1974, Argentina 1978, España 1982 y México 1986; pero sin premio. Su mejor rendimiento con la Tricolor se dio en la Copa América en la edición del año 1975, donde se colgó la medalla de plata y anotó un doblete en nueve partidos jugados.