George Foreman, el legendario boxeador estadounidense que se enfrentó a Mohamed Alí en la icónica «Pelea del Siglo» en 1974, falleció a los 76 años. Foreman, quien también fue un empresario y ministro religioso, dejó un legado indeleble en el mundo del boxeo y más allá.
Foreman nació el 10 de enero de 1949 en Marshall, Texas. Comenzó a boxear a los 18 años y rápidamente se convirtió en uno de los prospectos más prometedores del deporte. En 1968, Foreman ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de México, lo que lo catapultó a la fama internacional.
Sin embargo, fue su pelea con Mohamed Alí en 1974 la que lo convirtió en una leyenda del boxeo. La «Pelea del Siglo» se llevó a cabo en Kinshasa, Zaire (ahora República Democrática del Congo), y fue una de las peleas más esperadas y vistas de la historia. Aunque Foreman perdió la pelea por nocaut en el octavo asalto, su actuación contra Alí lo convirtió en un héroe para muchos.
Después de su retiro del boxeo en 1977, Foreman se convirtió en un empresario exitoso y lanzó una línea de parrillas de cocina que llevan su nombre. Sin embargo, fue su conversión al cristianismo en 1979 lo que marcó un punto de inflexión en su vida.
Foreman se ordenó como ministro religioso en 1980 y fundó la Iglesia de la Esperanza en Houston, Texas. A lo largo de los años, se convirtió en un líder religioso respetado y un defensor de la justicia social. Foreman también fue un autor prolífico y escribió varios libros sobre su vida y su fe.
A lo largo de su vida, Foreman recibió numerosos premios y reconocimientos por sus logros en el boxeo y más allá. Fue incluido en el Salón de la Fama del Boxeo Internacional en 2003 y recibió la Medalla Presidencial de la Libertad en 2009.
La muerte de George Foreman ha sido lamentada por la comunidad del boxeo y más allá. Su legado como un boxeador formidable, un empresario innovador y un líder religioso inspirador seguirá viviendo en la memoria de los fans y seguidores de todo el mundo.
