Un hecho causó revuelo e indignación en los últimos días en Buenos Aires (Argentina), luego de que una mujer identificada como María Delia Ludueña confesara que asesinó a su hijastra de 13 años, porque sintió celos de ella.
La misma mujer fue quien llamó a las autoridades, informándoles que la adolescente no estaba respirando. Una vez los agentes hicieron presencia en el lugar, se encontraron con Nazareth (como fue identificada la menor), sin signos vitales y botada en el suelo.
Según lo que indicó el estudio forense, la joven presentaba desgarros en su zona intima, signos de desnutrición, hemorragias y quemaduras.
Posteriormente, esta pareja fue nuevamente citada ante la Policía, y fue donde la mujer confesó que, en efecto, había cometido este crimen, y que se le “había pasado la mano”, ya que sentía “muchos celos”, por el trato distinto que tenía el padre de la adolescente con ella.
De acuerdo a lo que pudo conocer el diario Clarín, la fémina le pego en varias ocasiones a la menor, y sus golpes fueron tan certeros que provocaron fuertes hemorragias internas que fueron causal principal del deceso de la joven.
Por otra parte, el padre se declaró inocente por lo que pasó, ya que los hechos sucedieron cuando él no se encontraba dentro del recinto. Y además mencionó que quien fuera su pareja había empalado a la víctima.
No obstante, esto no fue válido y juntos fueron apresados y acusados por los delitos de abuso sexual y homicidio.
FUENTE: SISTEMA INTEGRADO DIGITAL – RCN RADIO – OSCAR BARRERO