El español Rafael Nadal, que se impuso este viernes al austríaco Dominic Thiem en un partido de exhibición en Adelaida (Australia) por 7-5 y 6-4, destacó «el enorme placer» que había supuesto «volver a jugar ante el público» que llenaba las gradas del Memorial Drive Tennis Club.
«El último año ha sido muy duro, el virus nos ha golpeado fuerte a todos, pero Australia nos está dando un ejemplo de cómo hacer las cosas», dijo Nadal tras el choque.
Las dos semanas que ha tenido que pasar en Adelaida de cuarentena «no son, por supuesto, la situación ideal, pero las cosas son así», añadió el jugador de Manacor.
Nadal jugará la próxima semana la Copa ATP con el equipo español y a partir del día 8 el Abierto de Australia, que prometió «intentar ganar una vez más». Su único triunfo en este Grand Slam data de 2009.
Dominic Thiem también mencionó lo agradable que era jugar con público, tras disputar los torneos de 2020 con las gradas vacías.
El austríaco comentó que el año pasado logró quitarse «mucha presión» tras ganar el Abierto de Estados Unidos, bromeó con que «no hay nada que hacer en Roland Garros ante este tipo», señalando a Nadal, y confió en hacer un buen papel en el próximo Abierto de Australia, torneo en el que el año pasado cayó en la final ante el serbio Novak Djokovic.