Hasta el sitio de la emergencia se desplazó equipo técnico de la Dirección Departamental de Gestión del Riesgo de Desastres, quienes realizaron un recorrido por las diferentes zonas del alud de tierra, desde su corona hasta su parte final, en el lecho del río Cusiana.
“Se presenta un fenómeno de remoción en masa de tipo rotacional, litológicamente compuesto por intercalaciones de lutitas y lodolitas (tipos de roca), fracturadas de la formación lutitas de macanal. El movimiento generó un desplazamiento de por lo menos 150 mil metros cúbicos de material. Se observan resumideros, agrietamientos en los costados y en la corona. Aunado, recordemos la presencia de las fallas de Chámeza y Pajarito”, señaló el Ingeniero Guillermo Pérez.
En la inspección técnica acudió también el director Regional del INVÍAS Arcenio Sandoval, el alcalde de Pajarito Jesús Riveros, Corporinoquia, ingenieros de la firma contratista y la dirección de Gestión del Riesgo de Boyacá, quienes después del recorrido descartaron un represamiento en el río Cusiana, el cual el día anterior alcanzó un taponamiento de hasta un 60%.
Desde allí se envió un mensaje de tranquilidad a la población pajariteña y a campesinos ribereños de Boyacá y Casanare. No obstante, se estableció un monitoreo permanente para generar la alerta temprana en caso de presentarse la inminencia de un estancamiento de agua.
Con respecto al trabajo que debe adelantarse para recuperar la movilidad, desde el INVÍAS se cuenta con un contrato de obra, que permitiría iniciar los trabajos de manera inmediata, una vez se pueda garantizar la seguridad de los obreros. Mientras tanto, se avanzará con análisis y monitoreo del sitio, en procura de establecer las obras idóneas para el sector.