La cifra de víctimas mortales del derrumbe parcial de un edificio de 12 plantas en Surfside se elevó a 11, con el hallazgo de un cuerpo sin vida en la montaña de escombros en que quedó convertida la parte colapsada, informaron este lunes las autoridades.
La cifra de víctimas mortales del derrumbe parcial de un edificio de 12 plantas en Surfside se elevó a 11, con el hallazgo de un cuerpo sin vida en la montaña de escombros en que quedó convertida la parte colapsada, informaron este lunes las autoridades.
Además de cuerpos, los rescatistas han encontrado restos humanos incompletos que los forenses están tratando de identificar.
Por causas hasta ahora no determinadas, el ala noreste del edificio Champlain Towers, inaugurado en 1981 y con un total de 136 apartamentos, se derrumbó en segundos a la 1.30 horas de la mañana del jueves 24 de junio, cuando sus habitantes dormían.
El alcalde de Surfside, Charles Burkett, dijo más temprano que aunque han pasado cinco días del derrumbe, todavía es posible hallar a personas con vida, como se ha demostrado en terremotos y otras catástrofes similares.
La mayoría de las víctimas mortales identificadas hasta ahora tenían origen hispano, como muchos de los rescatistas, entre los que hay equipos llegados de otras zonas de Estados Unidos y también de países como México e Israel.
Entre los fallecidos están Antonio y Gladys Lozano, un matrimonio de origen cubano de 83 y 79 años, quienes, según sus familiares, temían ser separados por la muerte y habrían cumplido 59 años de casados en julio.
Los venezolanos Leon Oliwkowicz, de 80 años, y Cristina Beatriz Elvira, de 74, también llevaban muchos años casados.
Otra víctima identificada es Manuel LaFont, un hombre separado de una colombiana, de 54 años, y natural de Houston, Texas, al que le gustaba jugar al baseball con su hijo en un parque cercano.
Ana Ortiz, de 46 años, y Luis Bermúdez, de 26, eran madre e hijo y provenían de Puerto Rico.
La primera víctima identificada fue la estadounidense Stacie Dawn Fang, de 54 años, cuyo hijo de 15 años, Jonah Handler, que fue sacado con vida de los restos del edificio el mismo día del derrumbe, se recupera en un hospital de sus lesiones.
La prioridad sigue centrada en dar con sobrevivientes o restos de víctimas del derrumbe, pero también se buscan indicios de las posibles causas de lo sucedido.