Dirigentes políticos de diferentes colectividades han solicitado investigar a la dirección del Inpec.
Un rechazo contundente emitió la dirección del Partido Consevador por la fuga de la excongresista Aida Merlano, en hechos registrados en la tarde de este martes en el norte de Bogotá y le pidió que dé la cara y cumpla la sanción por delitos electorales.
El vicepresidente del Partido Conservador, Wadith Manzur, señaló que las responsabilidades son individuales y la colectividad se aparta de toda responsabilidad por la actuación de la excongresista Merlano.
“Rechazamos contundentemente cualquier tipo de actos, creemos que es importante que a la persona que se le acusa de algo o que ya ha sido condenada por cualquier delito tiene que darle la cara a la sociedad y cumplir con sus sanciones», precisó.
El dirigente político indicó que no tenemos absolutamente nada que ver con esto, eso es una responsabilidad personal y esperamos que pronto aparezca y dé la cara y cumpla con su sanción, que ya fue impuesta por la Corte Suprema de Justicia”, afirmó Manzur.
Congresistas de diferentes partidos se pronunciaron al respecto pidiendo a los entes de control una rápida reacción para establecer responsabilidades.
El representante de la Alianza Verde, Inti Asprilla, señaló al director del Inpec de tener algún tipo de responsabilidad administrativa por la fuga de Merlano.
“Esto amerita inmediatamente una investigación por parte de la Fiscalía y la Procuraduría porque aquí es indudable que hubo personal del Inpec involucrado en esta fuga”, afirmó Asprilla.
El representante a la Cámara, Germán Navas, señaló a su turno que el Inpec fue excesivamente condescendiente con la excongresista conservadora porque posiblemente era “una reclusa de primera clase”.
“Demasiadas garantías le dieron tal vez, hay reclusos de primera, segunda y tercera y parece que hay algunos que duermen en casinos, clubes y otros salen montando en moto”, afirmó Navas Talero.
Aida Merlano había sido condenada a 15 años de prisión por compra de votos en las elecciones legislativas de 2018.
Merlano estaba recluida en la cárcel El Buen Pastor, en Bogotá, y fue llevada a la carrera al Centro Médico de La Sabana para asistir a una cita odontológica. El consultorio está ubicado en el tercer piso de un edificio, desde ese punto descendió para fugarse.
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