Uno de los siete últimos exjefes del secretariado de las Farc, Pastor Alape, reconoció los vejámenes a los que fueron sometidas las víctimas de secuestro y desaparición forzada en el marco del conflicto, entre los que se destacan casos de violencia sexual en todos sus niveles.
Las declaraciones se dieron en el tercer día de la audiencia del histórico reconocimiento de los exguerrilleros ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), sobre los más de 21.000 secuestros perpetrados por las Farc.
“Estamos reconociendo nuestra responsabilidad como último secretariado, como quienes ordenamos, quienes no generamos control para que se dieran situaciones de maltrato contra las víctimas de violaciones sexuales que estamos asumiendo”, afirmó.
Señaló que “con dolor cargamos todas las humillaciones a las que sometimos a colombianos, personas humildes, por las que nos levantamos y nos comprometimos a luchar”.
Dijo que estas audiencias se convierten en un espejo que les permite ver el horror que representó la violencia armada que generaron por varias décadas en Colombia.
“Es enfrentarnos a nuestro propio dolor. Ese que se produce cuando uno cree que estaba haciendo las cosas bien y descubre que estaba cometiendo horrores. No errores, ¡horrores! ¡Graves crímenes!”, dijo.
Farc negoció con el DAS y el CTI de la Fiscalía
Pastor Alape confesó que la desaparecida guerrilla tuvo nexos con el DAS y el CTI, para determinar quienes eran potenciales víctimas de secuestros.
“Cuando llegamos a este otro proceso de descomposición de la organización (Farc) y de sus liderazgos, se hicieron acuerdos con bandas, es decir con criminales” , afirmó
Explicó que “no solamente se hicieron acuerdos con bandas, sino también con estructuras del Estado como el DAS (Departamento Administrativo de Seguridad) y el CTI, porque esa era una práctica en la que se tenía que invertir en inteligencia para pagar al que tuviera la información”.
Alape dijo que la guerrilla de las Farc se degradó a tal nivel, que no existía ningún sentido ético, humano y menos revolucionario.