La Asociación Colombiana del Petróleo, (ACP) rechazó los recientes ataques registrados en los campos, Castilla y Chichimene, en Acacías, Meta.
Según el gremio, durante los últimos 16 días se han registrado amenazas contra el personal, sabotajes y actos vandálicos contra lainfraestructura, “que representan riesgos para la seguridad física de trabajadores y contratistas, en particular en unas instalaciones industriales de las características de estos campos”.
“La intimidación y la violencia desvirtúan cualquier acto de protesta, no podemos permitir que estos actos vandálicos se vuelvan parte del paisaje en las zonas de operación petrolera”, afirmó la agremiación.
Según el presidente del gremio, Francisco José Lloreda, “este tipo de situaciones son una seria amenaza para la viabilidad de la industria de hidrocarburos en el país”.
No obstante, el presidente de Ecopetrol, Juan Carlos Echeverry manifestó que la situación en esta sección del país ya se normalizó; sin embargo le pidió al gobierno reglamentar un decreto que privilegia en materia laboral a las personas que vivan en estas zonas, lo que ha ocasionado conflictos sociales y laborales.
