El Gobierno Nacional está trabajando en la construcción de todo el marco legal que se necesita para adelantar negociaciones de paz con los grupos ilegales como el ELN y garantizar el sometimiento a la justicia de organizaciones crimínales como el Clan del Golfo.
Para ello, en el Congreso de la República se está tramitando la ley de orden público y se espera que tan pronto se radique la ley de acogimiento, se inicien las gestiones necesarias para cumplir la promesa de campaña de que haya una paz total en Colombia.
Sin embargo, algunos sectores políticos han expresado preocupación por el incremento de las acciones violentas en algunas regiones del país. Ante esto, la representante Saray Robayo le pidió al presidente Gustavo Petro no bajar la guardia y seguir combatiendo estos grupos ilegales, mientras se negocia con ellos su rendición.
Robayo llamó la atención también de autoridades como la Fiscalía y la Fuerza Pública, ante la toma de predios privados y públicos, que ha generado enfrentamientos entre la sociedad civil, las amenazas a trabajadores del agro y el reciente secuestro del empresario ganadero cordobés Salin Haddad, el pasado sábado en su propiedad.
“No solo están creando zozobra, sino que nos está llevando a situaciones como el secuestro de empresarios que hacía años venía en descenso en el país”, indicó.
“No es posible que ante la gravedad de los hechos que vienen ocurriendo en zonas rurales no haya un rechazo y una actitud contundente de parte del Gobierno Nacional para ponerle freno a los incidentes que a diario crean desazón en la población”, añadió.
Ante esto, insistió en que la implementación de una paz total también pasa por brindar garantías de seguridad a todos los colombianos, especialmente en los sitios en donde mayor injerencia tienen las organizaciones criminales.
“Si queremos alcanzar una paz total y la seguridad humana que promulga el Presidente Gustavo Petro Urrego, no se puede bajar la guardia mientras se negocia con los grupos al margen de la ley, disidencias, Bacrim, ELN y grupos delincuenciales, pues corremos el riesgo de perder el enfoque, mientras la violencia lejos de ceder incrementa la inseguridad en la población”, manifestó.
Este semana será clave en el Congreso para el trámite de la prórroga de la Ley 418 y también se espera que la ley de sometimiento pueda ser radicada en el Congreso.