Un extraño caso se presentó en San Antonio (Texas), en donde un hombre fue llevado de urgencia a un centro médico luego de que perdiera la sensibilidad en los dedos de sus pies y sufriera síntomas graves de una gripa.
El hombre identificado como Michael Kohlhof, de 35 años de edad, sufrió luego un shock séptico y tuvo que ser trasladado de urgencia a una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
A las 24 horas, Kohlhof recibió un ventilador, diálisis, antibióticos, vasopresores y numerosos medicamentos intravenosos para mantenerlo con vida a medida que sus órganos comenzaban a colapsar.
“Para finales del 20 de junio, me dijeron que llamara a la familia inmediata para que vinieran de todas partes del país para despedirse. Estaban preocupados de que tuviera muerte cerebral”, indico la madre de Kohlhof, J’Leene Hardaway.
Luego de casi dos semanas de intensos tratamientos médicos, Kohlhof milagrosamente se recuperó y le fue retirado el ventilador y la sedación el 1 de julio, sin graves consecuencias físicas.
Según información suministrada por su madre, las manos y los pies de Kohlhof desarrollaron gangrena seca como resultado del tratamiento con vasopresores, uno de los muchos medicamentos que le salvaron la vida.
El equipo de especialistas, determinó que la sepsis que desarrolló y el rápido declive de Kohlof se identificó con el tifus, se originó por una picadura severa y traumática de una sola pulga.
Los médicos le dijeron a la familia que el tipo de tipus que padecía Michael Kohlhof era extremadamente raro en los Estados Unidos.
De acuerdo con el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, el tifus transmitido por pulgas se presenta en climas tropicales y subtropicales de todo el mundo, incluidas áreas de los Estados Unidos, es decir, el sur de California, Hawái y Texas.
“El [tifus] no tratado puede causar una enfermedad grave y daño a uno o más órganos, incluidos el hígado, los riñones, el corazón, los pulmones y el cerebro”, explicó el CDC.
La gangrena de Kohlhof no tenía tratamiento y los médicos se vieron obligados a amputarle ambas manos hasta los antebrazos y la mitad de los pies a mediados del mes de julio.
Cabe resaltar que Michael Kohlhof reside en Houston (Texas) y solo había estado en San Antonio para ayudar a cuidar a su madre mientras se recuperaba de una cirugía en el pie.
Fuente: Sistema Integrado Digital – RCN Radio – Luis Fernando Julio