Luego de ser elegido como el nuevo procurador general de la Nación, Fernando Carrillo aseguró que no tendrá sectarismos políticos y que trabajará para ofrecerles garantías a todos los colombianos.
Es por esto que se ofreció como una especie de mediador para poder tender puentes entre el Gobierno y el Centro Democrático en momentos en que se construye un nuevo acuerdo de paz.
“Por supuesto que aspiro a ser ese puente. El ejercicio de mis funciones sólo se va a dar hasta enero del año entrante, pero espero poder constituir desde los espacios, primero afuera hasta tomar posesión en la primera semana de enero”, sostuvo Carrillo.
“Yo sí creo que es posible volver a tejer esas posibilidades de cohesión, de unidad, de concordia”, manifestó.
Dijo que el procurador debe estar en una balanza y velar por el cumplimiento de los derechos de todos los ciudadanos sin importar su filiación política.
“Yo no quiero ser un factor de perturbación política, hay que cerrar la página de lo que fue la campaña y superar las cosas del pasado”, finalizó.
El Centro Democrático aportó con sus votos para que Fernando Carrillo resultara ungido como el procurador general de la Nación.