Según un concepto enviado por Alejandro Ordóñez, los “besos y abrazos” entre los estudiantes dentro de las instituciones deben ser controlados.
El procurador general de la Nación, Alejandro Ordóñez, le solicitó a la Corte Constitucional que se contemple la posibilidad de incluir en el manual de convivencias de los colegios del país la prohibición de las expresiones de afecto excesivas por parte de los estudiantes.
Según un concepto enviado por Ordóñez al alto tribunal, los “besos y abrazos” realizados entre los estudiantes al interior de las instituciones educativas deben ser controladas por medio de los reglamentos.
Este concepto fue enviado para que se tenga en cuenta en la tutela que estudia el alto tribunal la cual fue instaurada para proteger los derechos de las parejas del mismo sexo dentro del sistema escolar en Colombia.
La tutela está relacionada con la reclamación que realizó la mamá del estudiante Sergio Urrego, quien al parecer se quitó la vida al ser objeto de actos discriminatorios por su condición homosexual, por parte de las directivas de esa institución educativa en la que cursaba el bachillerato.
“El ‘examen adicional’ que realiza la Corte Constitucional en estos casos constituye una oportunidad única para la emisión de doctrina constitucional sobre la violación a los derechos fundamentales a parejas del mismo sexo en el sistema escolar“, señala los argumentos en esta tutela.
Dentro de su concepto, el Procurador advierte que si están prohibidos los actos obscenos en los espacios públicos, en los colegios también se debería prohibir los actos que sean calificados de esta forma.
La Corte Constitucional deberá analizar en las próximas semanas si acoge o no esos argumentos y sienta una jurisprudencia sobre los actos de expresión que se realizan al interior de las instituciones educativas.
