Las plenarias de Senado y Cámara aprobaron la conciliación de un proyecto de ley que ya pasa a sanción presidencial y que promueve la inclusión laboral de las mujeres en sectores en donde comúnmente no han tenido participación.
El propósito de esta iniciativa es impulsar la contratación de personal femenino en la industria agropecuaria, de transporte, de minas y energía, de intermediación financiera, de servicios públicos, construcción, ciencia, tecnología e innovación, entre otros.
El senador Carlos Fernando Motoa, ponente de la propuesta, sostuvo que la misma también “tiene un contenido en materia de formación y educación para que las mujeres puedan ingresar a estos sectores productivos del país”.
La iniciativa plantea que en un plazo de un año el Gobierno tendrá que fortalecer la estrategia de promoción y capacitación para garantizar la inclusión laboral de las mujeres en los sectores previamente mencionados.
El Sena y el Ministerio de Educación tendrán que identificar los programas de formación en donde solo se estén presentando hombres y buscar la manera de fomentar la vinculación de las mujeres a los mismos.
Con esta nueva política pública de inclusión laboral, también se buscará priorizar el empleo para las mujeres cabeza de hogar y la población con discapacidad.
De igual forma, desde el Servicio Público de Empleo se buscará promover mayores espacios de trabajo para las mujeres y cuando haya empates en las convocatorias que haga el Gobierno para apoyar emprendimientos, se priorizarán aquellos que sean liderados por personal femenino.
El proyecto sale adelante en el Congreso en momentos en que, según el Dane, el desempleo de las mujeres en marzo pasado alcanzó el 18,8% en el país y la tasa de desocupación en mujeres jóvenes ya supera el 31%.