Rusia anunció este viernes que va a restringir el acceso a la red social Instagram, a la que acusa de difundir llamados a la violencia contra los rusos en relación con el conflicto en Ucrania.
El poderoso Comité de Investigación de Rusia había dado cuenta previamente del inicio de acciones legales contra Meta, casa matriz de Facebook e Instagram, por haber flexibilizado sus reglas sobre mensajes violentos destinados al ejército y a los dirigentes rusos.
El comité dijo que inició investigaciones «ante los llamados ilegales al asesinato de rusos por parte de colaboradores de la sociedad estadounidense Meta».
La fiscalía rusa le pidió que clasificara al gigante de internet de organización «extremista» y bloqueara el acceso a Instagram en el país. A Facebook ya no se puede acceder prácticamente desde el 4 de marzo.
Según la oficina del fiscal general, «el contenido distribuido en Instagram contiene llamados a cometer actos violentos contra ciudadanos de Rusia, incluido el personal militar».
El regulador de telecomunicaciones ruso, Roskomnadzor, dijo que el acceso a Instagram estaría restringido a partir del lunes para dar tiempo a los usuarios a transferir sus datos a otras redes.
Meta informó el jueves que estaba haciendo excepciones a su política de incitación a la violencia y el odio al no eliminar publicaciones hostiles al ejército y los líderes rusos.
«Debido a la invasión rusa de Ucrania somos indulgentes con formas de expresión política que normalmente violarían nuestras reglas sobre el discurso violento, como ‘muerte a los invasores rusos'», confirmó Andy Stone, gerente de Comunicaciones de Meta.
«Seguimos sin permitir llamadas creíbles a la violencia contra los civiles rusos», agregó. Rusia ya había bloqueado a Facebook en su territorio la semana pasada como represalia por la decisión del grupo californiano de prohibir los medios cercanos al gobierno de Vladirmir Putin, como RT o Sputnik.