Persiste la incertidumbre en Venezuela con respecto a los resultados de las recientes elecciones presidenciales del 28 de julio, que dieron como ganador a Nicolás Maduro. Entre tanto, el Consejo Nacional Electoral (CNE) aún no ha revelado las actas oficiales de los escrutinios.
Cabe mencionar que en las últimas horas se conoció un informe hecho por parte de la Misión de Observación Electoral (MOE), reveló que Edmundo González fue el ganador con cerca del 70% de la votación, lo que ha generado un intenso debate sobre la validez y transparencia del proceso electoral en el vecino país.
En diálogo con Radio Red de RCN Radio, Alejandra Barrios, directora de la MOE, explicó los métodos utilizados para validar los resultados. Según Barrios, la ONG examinó un 73% del total de las actas disponibles, lo que equivale a 21.900 documentos, para confirmar los resultados.
Señaló que el análisis hecho por la MOE se basó en las tirillas impresas por las máquinas de votación electrónicas, que son accesibles en su página web oficial.
Dichas tirillas cuentan con múltiples mecanismos de seguridad, incluyendo códigos QR y firmas electrónicas, que permiten verificar la integridad de los documentos.
«El sistema electoral venezolano se distingue por su tecnología avanzada, con aproximadamente 30.000 máquinas de votación electrónicas distribuidas en todo el país. Cada máquina emite una tirilla al final del proceso electoral, similar a un recibo de supermercado, que resume los votos contabilizados. Esta información es luego subida a una plataforma web donde la MOE realiza una verificación rigurosa», dijo.
El informe de la MOE señaló que de los 9.5 millones de votos analizados, Edmundo González recibió 6.3 millones, mientras que el actual presidente Nicolás Maduro obtuvo 2.8 millones.
De acuerdo con Alejandra Barrios, el resultado es consistente con la información disponible en los boletines preliminares del CNE, que reportaban una participación total de 12.3 millones de votos.
La diferencia de votos hace improbable que Maduro haya superado a González, incluso si todo el 27% restante de las actas verificables hubiese favorecido a Maduro.
El análisis de la MOE ha generado una reacción fuerte por parte del gobierno venezolano. El presidente Nicolás Maduro y otros funcionarios han cuestionado el informe, acusando a la MOE de ser parcializados y malintencionados.
La tensión ha generado a insultos y descalificaciones públicas contra la MOE, en un esfuerzo por desacreditar su trabajo.
En respuesta a las críticas, Alejandra Barrios destacó que el análisis realizado por la MOE se basó en datos objetivos y verificables, y no en especulaciones, al tiempo que agregó que la ONG está comprometida con la transparencia e integridad del proceso electoral.
Sin embargo, reconoció que la capacidad de la MOE para verificar el 100% de las actas se vio limitada debido a la calidad de las imágenes disponibles en la plataforma web del CNE.
Subrayó que la verificación de las tirillas es una forma efectiva de garantizar la precisión de los resultados, aunque advirtió que la posibilidad de manipulación no puede ser completamente descartada. Aun así, enfatizó que cualquier alegación de fraude por parte del CNE debe ser respaldada por pruebas concretas y no por meros dichos.
En cuanto a las posibilidades de que se realicen nuevas elecciones o se anulen los resultados actuales, Barrios indicó que sería fundamental una auditoría internacional para determinar la veracidad de las alegaciones de fraude, dado que el CNE no ha permitido tal auditoría y no ha presentado evidencia concreta de irregularidades, la situación sigue siendo incierta y altamente polémica.
Fuente: Sistema Integrado de Información – RCN Radio – Andrés Prieto