Entre 2.500 y 3.000 soldados ucranianos han muerto desde que se inició la invasión de Ucrania ordenada por Rusia, de la que hoy se cumplen tres meses, y que también ha costado la vida de al menos 3.930 civiles en todo el país.
Según datos recopilados por el portal de noticias ucraniano The Kyiv Independent y difundidos por la Fiscalía del país, los bombardeos rusos de diversa índole que han asolado el país han matado también a 234 niños.
Asimismo, 433 menores han resultado heridos, según estas cifras, que no son completas, dado que en lugares donde las hostilidades no han cesado o los territorios han sido ocupados por los rusos, no se ha podido hacer un cómputo fiable.
Y lo mismo ocurre con el número de civiles muertos o heridos, que podría ser mucho mayor dadas las dificultades existentes en el país para su recuento.
El portal ucraniano señala que un total de 10.000 soldados ucranianos han resultado heridos en el campo de batalla por ataques del invasor, que han lesionado también a 4.532 civiles.
En cifras, las autoridades del país han registrado y documentado hasta el momento un total 13.073 hechos que consideran constitutivos de crímenes de guerra cometidos por los rusos.
El Ejército ruso ha disparado contra Ucrania en estos tres meses de guerra un total de 2.275 misiles y ha llevado a cabo más de 3.000 ataques aéreos, según el presidente ucraniano, Volódimir Zelenski,
“En total, desde el 24 de febrero, el ejército ruso ha lanzado 1.474 ataques con misiles contra Ucrania, utilizando 2.275 cohetes de diferente tipo», precisó Zelenski en un mensaje emitido este martes.
Según Euromaidan Press, otro portal de noticias independiente ucraniano, antes de que se iniciara la guerra, Rusia ocupaba 43.000 kilómetros cuadrados del territorio ucraniano, lo que representaba el 7 % de la extensión total del país.
En la actualidad, la ocupación se extiende sobre 125.000 kilómetros cuadrados del territorio, lo que representa que ha multiplicado casi por tres su control sobre el espacio soberano de Ucrania.