El Tribunal de Justicia y Paz en Bogotá le concedió este viernes la libertad a Ramón Isaza alias ‘El Viejo’, considerado uno de los ex jefes paramilitares más antiguos de las autodefensas.
La decisión del Tribunal de dio teniendo en cuenta que Isaza ya cumplió los ocho años de prisión a los que fue condenado, que es la máxima sentencia que contempla el marco jurídico de la ley de Justicia Paz.
Según el Tribunal, alias ‘El Viejo’ cumplió con los presupuestos de la ley de Justicia y Paz como la reparación de los afectados y las confesiones de los hechos cometidos durante su militancia en el grupo paramilitar.
Al exjefe paramilitar, a lo largo del proceso penal, se la atribuyeron más de 11 mil víctimas directas e indirectas.
Sin embargo, se conoció que la Fiscalía y el Tribunal van a adelantar un cruce de información de expedientes para saber si la orden de libertad se puede o no hacer efectiva, teniendo en cuenta que alias ‘El Viejo’ tiene otros procesos pendientes por justicia ordinaria.
Ramón Isaza, alias ‘El Viejo’, nació el 30 de septiembre de 1940 en Sonsón (Antioquia). Dese joven vivió en el corregimiento Las Mercedes, de Puerto Triunfo en el Magdalena Medio.
Según el portal Verdadabierta.com, en 1978 Isaza formó un grupo de campesinos de la región para combatir a la guerrilla que les robaba los animales y los extorsionaba. En aquellos días, relata el propio Isaza, se compraron ocho armas en Puerto Berrío y decidieron emboscar a los veinte guerrilleros que los azotaban.
Luego de esa acción, se dio cuenta de que cobrarles a ganaderos por prestarles seguridad iba a ser un negocio prometedor.
En la década de los noventa, alias ‘El Viejo’ decide irse lanza en ristre contra la máquina de guerra de Pablo Escobar, que buscaba acordar con los nacientes grupos paramilitares el control de cultivos ilícitos en Puerto Boyacá y Puerto Triunfo.
En aquella época a Isaza le matan tres sobrinos y a su hijo John, mientras que seis de sus ocho hijos se formaron en las huestes de los paramilitares.
Isaza aceptó entonces una unificación, ante la propuesta del jefe paramilitar Carlos Castaño, sin embargo, decidió ir de nuevo por su lado luego de que según él al grupo ingresó un contingente de narcotraficantes a reforzar las finanzas de la organización.
Y llegó el 2004, año en el que decide sentarse a la mesa de Santa Fe de Ralito para luego, en 2006, desmovilizar sus 990 hombres.
Entre los múltiples delitos de los cuáles fue inculpado está la masacre de 11 cazadores de Falán en Armero-Guayabal el 17 de enero de 2003. También de la desaparición de 16 personas de la vereda La Esperanza del Carmen de Viboral.
Alias ‘El Viejo’ confesó más de 580 crímenes perpetrados por su grupo paramilitar, sin embargo, al bloque a su cargo se le adjudican alrededor de 1.200 muertes.