Contratando servicios sexuales a modelos, reuniéndose con narcotraficantes de otros países y recibiendo orientaciones de pitonisas era como, según lo revelaron las autoridades, vivía Martín Farfan, el señalado cabecilla del bloque libertadores del Vichada, muerto en combates con la Policía.
A una pequeña choza ubicada en zona rural del municipio de Cumaribo llegaban poderosos narcotraficantes de otros países; en ese improvisado albergue, construido con madera y paja vivía alias ‘Pijarbey’, uno de los delincuentes más peligrosos de los Llanos Orientales.
El general Jorge Nieto, director de seguridad ciudadana de la Policía, aseguró que Farfán “tenía contactos internacionales con personas de España, contactos de Puerto Rico y de México“.
Agregó que además de narcotraficantes también el líder del Bloque Libertadores recibía cada dos días a mujeres, entre ellas, algunas modelos a quienes a cambio de jugosas sumas de dinero las sometía sexualmente.
“Esta persona, como la mayoría de los capos, era un adicto a la pornografía y sometía a sus compañeras sexuales a abusos y explotación“, aseguró el General.
Lo encontrado en computadores, memorias USB y documentos en el lugar en el que murió tras un combate, dio cuenta que alias ‘Pijarbey’ también era supersticioso.
“Tenía dos pitonisas que lo acompañaban y lo aconsejaban y que incluso le recomendaban que utilizara talismanes para protegerse de las amenazas“, dijo el Director de seguridad ciudadana de la Policía.
Las extravagancias no eran menores. A pesar de vivir en lugares apartados en el fondo de la selva, alias ‘Pijarbey’ veía cómo pasaba el tiempo a través de valiosos relojes.
“Coleccionaba relojes Rolex, algunos de los cuales los pedía con incrustaciones de diamantes y otras piedras preciosas, estos relojes costaban entre 60 y 80 millones de pesos“, contó el General.
Martín Farfan era uno de los hombres más buscados por las autoridades y murió tras enfrentarse con la Policía el pasado fin de semana. Aún su cuerpo no ha sido reclamado por ningún familiar.
Martín Farfán o alias ‘Pijarbey’ era uno de los cabecillas de las organizaciones que se transformaron en bandas criminales tras la desmovilización de las autodefensas.