El gobernador del Estado de Sao Paulo, Joao Doria, prevé que la china Coronavac, una de las vacunas más avanzadas contra la COVID-19 y en proceso de producción en Brasil, se administre también en los países de Sudamérica.
«En una primera fase, queremos vacunar primero a todos los brasileños y una segunda fase, a otros países«, indicó Doria en una conferencia de prensa celebrada este lunes. Por eso, «cuanto más rápido vayamos, mejor, y así la podremos administrar a nuestros hermanos de Sudamérica».
La Coronavac, un inmunizante fruto de la cooperación del laboratorio privado chino Sinovac y el Instituto brasileño Butantan, con sede en Sao Paulo, ya tiene aseguradas 46 millones de dosis hasta diciembre, más otras 16 para el primer trimestre de 2021, que podrán administrarse una vez que la vacuna reciba la aprobación final de los reguladores de salud de Brasil.
Sin comprometerse a una fecha, el director del Butantan, Dimas Covas, indicó que cuando haya «dosis suficientes» podrán administrarse fuera de Brasil a países de la región a través de la Organización Panamericana de la Salud.
Doria indicó que es primordial ampliar la fábrica de Butantan para poder administrar la vacuna a gran escala en el resto de regiones de Brasil.
Para ello, anunció que fueron recaudados 97 millones de reales, uno 18,3 millones de dólares, de los 160 millones de reales, 30 millones de dólares, necesarios para realizar esa ampliación, apenas con donaciones privadas y sin contrapartidas para las empresas privadas. Para el resto de financiación, el gobierno de Sao Paulo sigue buscando el apoyo del gobierno federal.
«La fábrica ya existe, hay que modernizar, equipar, comenzamos las obras en noviembre», anotó el gobernador del estado más poblado y rico de Brasil y donde hasta ahora se han registrado el mayor número de casos y muertes país. Se prevé que las obras puedan comenzar en noviembre y estén concluidas a finales de 2021.
Asimismo, Doria explicó que la región de Sao Paulo ha registrado la quinta semana consecutiva con caída de muertes, un 8 % del 6 al 12 de septiembre, en relación a la semana del 30 de agosto al 5 de septiembre.
El estado de Sao Paulo, con 46 millones de habitantes, registra desde el inicio de la pandemia 32.642 fallecimientos y casi 900.000 contagios, que representan en torno a un quinto del total de muertes y contagios en Brasil (131.000 decesos y 893.000 infecciones).
«La ocupación en las unidades de cuidados intensivos cayeron hasta el 51 %, la más baja desde marzo, eso no significa relajación, hay que seguir en cuarentena hasta la llegada de la vacuna», alegó el gobernador.