El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó este sábado que el presidente ruso Vladimir Putin no puede permanecer en el poder» y calificó además la invasión rusa de Ucrania como un «fracaso estratégico» de Moscú.
En un discurso en el Palacio Real de Varsovia, la capital polaca, donde se congregaron entre 750 y 1.000 personas, Biden declaró, «por el amor de Dios, este hombre no puede permanecer en el poder».
Después del discurso, un alto funcionario de la Casa Blanca, que pidió el anonimato, quiso matizar esas palabras y aseguró que Biden no se quería referir al poder de Putin en Rusia o a la posibilidad de «un cambio de régimen».
«El punto que el presidente quería subrayar es que no se puede permitir que Putin ejerza su poder sobre sus vecinos en la región», indicó esa fuente.
El discurso de Biden estuvo plagado de acusaciones contra Putin, al que calificó de «dictador», y consideró «obscenas» sus alegaciones de que la invasión a Ucrania trata de «desnazificar» ese país.
«Putin tiene el descaro de decir que está desnazificando Ucrania. Es una mentira, es cínico, él lo sabe. También es obsceno», dijo Biden, que consideró que «simplemente no hay justificación» para la decisión que Rusia ha tomado de librar una guerra en Ucrania.
Consideró, además, que la guerra en Ucrania se ha convertido en un «fracaso estratégico para Rusia» en su primer mes y ha hecho que el rublo se reduzca a «escombros» con una gran caída en su valor.
«Me niego a creer que [la opinión pública rusa] vea con beneplácito el asesinato de niños y mayores inocentes o que acepte que hospitales, escuelas y maternidades sean bombardeadas por misiles y bombas rusas», agregó.
Dirigiéndose al pueblo ruso, Biden afirmó que ellos «no son el enemigo» de Estados Unidos y que toda la «culpa» recae sobre Putin, al que acusó de haber devuelto a su país «al siglo XIX».
El presidente estadounidense comenzó y terminó su discurso con referencias al papa polaco Juan Pablo II y repitió en varias ocasiones su célebre frase: «No tengáis miedo»
Pero el conflicto, según Biden, no tiene visos de terminar pronto. La batalla «entre democracia y autocracia» «no se ganará en unos días o meses. Debemos armarnos para un largo combate», consideró.
Biden reiteró que Estados Unidos no deseaba entrar en conflicto con las tropas rusas en Ucrania, pero advirtió a Moscú que no intente avanzar «ni una pulgada» en territorios de países de la OTAN, recordando la «obligación sagrada» de la defensa colectiva entre los miembros de la alianza transatlántica.
«Tendremos un futuro diferente, un futuro más brillante, arraigado en la democracia y los principios, la esperanza y la luz», afirmó el presidente estadounidense, asegurando a los ucranianos: «Estamos con ustedes», apuntó.